jueves, 12 de junio de 2008

Re-comenzar ?

Siempre me ha costado diferenciar entre lo que veo y lo que siento.
Tomo la imagen y la hago mía, la transformo como si pudiera trabajar mentalmente sobre ella y luego pasa lo que pasa: jamás vivo a tiempo real. Lo que veo termina por ser una caducada secuencia de fotogramas con hilo musical de fondo. Por cierto, mi selección musical mental es bastante mala. Sin embargo, prefiero vivir así que morir sin ver, o que ver sin pintar, esto sobre todo.
Desde que me recuperé de unas fiebres que dejaron secuelas he muerto tres veces y algo se ha despertado en mí. He notado cambios bruscos. Por ejemplo, antes miraba y sonaba la misma música. Ahora miro y suenan tres a la vez. Hasta puedo hacer que se congelen momentos para que desaparezcan otros. El miedo ha desaparecido definitivamente. Ahora siento una paz infinita. He decidido comenzar una vida. Una vida sencilla, sin grandes pretensiones, sin mucho equipaje -aunque con un buen coche, eso sí, pronto. Sólo con esos pequeños deseos posibles de los que te hablé un día.
He descubierto que se renuncia a un sueño cuando no estás preparado para afrontar lo que viene antes. Que mueres definitivamente cuando te regocijas en tu melancolía. Que eres cobarde cuando actúas sin sentir. Cuando te amas sólo a ti, y esto en mí sí que es imposible, sobre todo porque para mí amar es hacer el amor sobre y ante todo.
Si yo no estuviera aquí, seguro que habría alguien echándome de menos a pesar del poco rato que llevo en esto. Porque nos necesitamos, es así. Aprendemos en compañía. Pensamos que morimos en soledad pero morimos cada día inyectados de experiencias, de besos, de suspiros y jadeos, de ataques de risas, de ratos en silencio. También se muere sintiendo el silencio y eso no tiene nada malo.

El silencio es el mayor ejemplo de una persona que no puede dejar de imaginar.

2 comentarios:

Revertiano dijo...

Fui un gran lector de Agatha Christie en mi adolescencia, y aun ahora repaso esas páginas de vez en cuando. A ver qué te parece este nuevo argumento que ella nunca escribió.

Una chica enigmática que es hija única. También es sobrina única, pero encuentra una prima para irse al norte. No sabía que su tío preferido (de quien ella es sobrina preferida también, única) vivía donde vivía.

Hummm.

No cierres sin embargo. Sigue recorriendo tu camino lleno de misterios.

Anónimo dijo...

"La señorita Packington se sentía sola, desesperanzada y enormemente sola. Pero su vida cambió cuando vio un anuncio en el periódico: «¿Es usted feliz? Si no lo es, consulte al señor Parker Pyne, 17 Richmond Street». "

Agatha Christie: "Parker Pyne investiga".

Saludos, Parker.

De Godiva.